viernes, 22 de noviembre de 2013

Procastinar

Odio cada día un poquito más a las personas que postergan todo. No se por qué es para una persona tan difícil el irse a hacer uno estúpidos exámenes de sangre???

Resulta que al señor B no se le antoja irse a hacer los exámenes, me está poniendo constantes excusas para no ir y creo que me está sacando de quicio. El sabe que es lo único que estoy esperando para hacer la consulta con el médico y proseguir dónde lo dejamos.

Estoy tan frustrada!!!

Pero bueno, yo he estado posponiendo el someterme a un régimen intenso para poder bajar de peso, así que también tengo mucha culpa. Y es que, no necesariamente soy la persona más saludable del mundo, hoy desayuné a las 10:30am una galleta de chocolate y una pastilla para adelgazar. Creo que si le sigo zambutiendo tantas porquerías a mi organismo, las pastillas no podrán funcionar. Hoy voy a pasar al gimnasio y me voy a inscribir, ya es demasiado!!!

También le voy a poner un ultimatum a mi amado tormento porque ya no puede pasar de la otra semana para hacernos esa consulta con el especialista, me estoy muriendo de los nervios.

En fin, la cultura de procastinación para mi, en estos días, es de lo peor... las cosas caminan cada vez mas lento.

jueves, 21 de noviembre de 2013

Primera consulta (por tercera vez).

Bueno, resulta que me armé de valor y fui a la consulta con el especialista en fertilidad.

Ni bien me vió y me mandó a quitarme la ropa (aunque sea un besito me hubiera dado antes). Me hizo un ultrasonido de aquellos feos dónde te meten cosas dentro de tu cosa y que DUELE! creo que lo odié un poquito mientras estaba allí viéndome las entrañas a la par de mi esposo que no dejaba de hacer caras de dolor imaginando seguramente que era él quien estaba recostado con un consolador gigante metido y que encima de todo lo siguieran empujando. Lo recuerdo y me sigue doliendo.

Bueno, resulta que tengo los ovarios algo agrandados, no se que significa eso y con el shock olvidé preguntar, pero espero en la próxima consulta volver a preguntarle. Obviamente tengo quistes, cosa que me había negado el anterior médico (quien por cierto me hacía ultrasonidos pélvicos cada vez que lo visitaba). Así que el diagnóstico inicial es que BINGO!!! soy la orgullosa poseedora de ovarios poliquísticos (joder!).

Entonces mi poco querido y muy colocho doctor me mandó a hacer un Histerosalpingograma (suena como a trabalenguas); también me mandó unos exámenes hormonales (por enésima vez) y al señor B le mandó un espermograma y otro examen que no recuerdo que era para ver si en un futuro (esperemos que no sea así) se pueda hacer una inseminación artificial o en casos extremos, una fertilización in vitro. También le mandó varios exámenes de sangre, muchos más que a mi.

Mis laboratorios de sangre, gracias a Dios, salieron todos en rangos normales, así que por eso no me puedo preocupar ahora.

El Histerosalpingograma, es un exámen médico que se le hace a la mujer entre el 4o o 5o día después de haberse desaparecido la menstruación. Introducen en la vagina un líquido de contraste con el objetivo de tomar una serie de radiografías y observar si no hay obstrucciones en las trompas de falopio. Respecto a este exámen, el médico me dijo que aproximadamente el 90% de las mujeres sienten dolor o ardor con la aplicación del líquido de contraste, y que de este porcentaje aproximadamente un 20% siente MUCHO DOLOR. Yo quise llorar.

El precioso médico me mandó a hacer este examen a un lugar donde aplican sedación, entonces el panorama se veía mucho mejor.

Tomé el medicamento para que apareciera la menstruación, esperé los días que había que esperar (5) e hice la cita. En la clínica me informaron que, la noche anterior, debía cenar ligero y al día siguiente podía desayunar ligero hasta antes de las 7 am. Entre 7 y 9 am podía tomar poca agua o un te relajante. Luego, debía presentarme a las 11am en la clínica con un acompañante.

Llegó el día, seguí las instrucciones y me fui a la clínica. Mi amado padre fue el que me llevó porque mi esposito acababa de comenzar a trabajar en un lugar nuevo y yo no quise que pidiera permiso para ausentarse. Pagué y pasé a una sala de espera. Un tiempo después, llegó mi esposo; a pesar de que le dije que no fuera, me sentí muy feliz de tenerlo a mi lado.

Me llamó una enfermera, que tenía aspecto de ser una dulce-joven abuelita. Muy cariñosa me pidió que fuera a hacer pipí y que me desvistiera de la cintura para abajo. Luego me coloqué una bata abierta hacia atrás, me recostaron en una camilla que tenía aspecto de haber salido de una película tipo Star Wars para luego colocarme una manta porque había frío.

Luego, entró el anestesista, un señor de mediana edad muy agradable que me explicó que me iban a poner una vía intravenosa, un suero y que poco a poco me iba a aplicar el sedante. Lo hizo y tuve que cerrar los ojos porque me comencé a marear.

:Zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz.......

-Señora, despierte. Ya terminamos con el procedimiento.

Desperté con mucho sueño y me preguntaron si me había acompañado alguien y dije su nombre. Poco después entró mi esposo y levanté para cambiarme. Salí un poco adormecida, pienso que era la sensación de blancanieves después del beso del príncipe, pero vamos, que los médicos no eran un príncipes y la aguja no era un beso.

Después de eso, solo me recomendaron no manejar por las siguientes 3 horas.

Ya para irnos, la enfermera-abuelita me dijo que esperaba vernos pronto pero para un ultrasonido de bebé porque había visto que todo estaba bien.

En fin, esa fue mi experiencia con la primera consulta y el Histerosalpingograma. Estoy esperando ir a la consulta donde esten todos los resultados de los exámenes y esperar un tratamiento.

Ansío que sea más facil de lo que se ve.